UN POCO DE PNL
La Programación Neurolingüística (PNL) es un enfoque de comunicación, desarrollo personal y psicoterapia, establecido por Richard Bandler y John Grinder en California, Estados Unidos, en la década de 1970.
Es el arte y la ciencia de la excelencia y deriva del estudio de como las mejores personas en distintos ámbitos obtienen resultados sobresalientes.
Sus creadores estudiaron a varios genios de la comunicación y la terapia: Virginia Satir terapeuta familiar, Fritz Perls fundador de la terapia Gestalt y Milton Erickson gran hipnoterapéuta. De forma que modelaron como éstos conseguían resultados exitosos en su manera de trabajar.
Las siglas PNL vienen de: “Programación” la intención de reprogramar comportamientos, creencias y procesos psicológicos; “Neuro” indica que todo comportamiento tiene su origen en una serie de procesos neurológicos; “Lingüística”, que responde a la noción de que todos estos procesos son expresados mediante un lenguaje verbal y corporal determinado.
Una presunción de la PNL es “El mapa no es el territorio” siendo el mapa la comprensión fragmentada que cada uno tenemos de la realidad, la cual es imposible conocer de una manera objetiva ya que vivimos según nuestra versión de ella. No abarcamos toda información presente a nuestro alrededor, primero tenemos los límites físicos, los sentidos nos permiten captar hasta cierto nivel (no detectamos los rayos infrarrojos, ni determinados rangos de sonidos) y segundo lo que percibimos pasa por filtros tanto internos como externos, culturales, sociales, familiares y educacionales. Un artista, un leñador y un botánico que caminan por el bosque, tendrán experiencias muy diferentes y se fijarán en cosas distintas.
El mapa no es el territorio, un plano de Zaragoza nos indica la ubicación del Tubo, pero indudablemente no es lo mismo que pasear por sus estrechas callejuelas, sumergirse en el bullicioso ambiente de un domingo soleado y entablar conversación saboreando un vino afrutado acompañado de una exquisita tapa de anchoa en Bodegas Almau.
Si te fijas en la imagen de arriba, observarás que para el hombre de la izquierda su mapa es el número seis, sin embargo para su compañero es el nueve, ¿quién está en lo cierto? Tú dirás que los dos, ya que estás viendo la situación desde otro punto de mira. Las posiciones perceptivas son los lugares desde los cuales cada uno ve su realidad.
La primera posición es la nuestra, es en la que vemos, oímos y sentimos a través de los sentidos. La segunda es la del otro, en la que nos acercamos al mundo de la persona que tenemos enfrente y somos capaces de empatizar y ponernos en su lugar y la tercera es la del observador objetivo, distante, la que ve ambas de modo neutral.
Tener la capacidad de ser flexible y pasar de una postura a otra nos permite interactuar y comunicarnos adecuadamente con los demás. El uso exclusivo de la primera nos centra en el yo, en creer erróneamente que sólo nosotros poseemos la razón, si estamos siempre en la segunda posición, pendientes más del otro, perdemos la conciencia de lo que nos ocurre y situarnos permanentemente de observador, nos lleva a distanciarnos, a actuar de manera mecánica como un robot y a no tomar parte.
Algunas presuposiciones de PNL son:
El mapa no es el territorio.
Ningún mapa es más real, verdadero o mejor que el mapa de otro.
Todas las personas tienen su propio mapa del mundo.
No es la realidad lo que limita a las personas, sino el uso que hacemos del mapa y la percepción a través de él.
No es igual la realidad a la experiencia de la realidad de cada persona.
Todas las personas tienen la capacidad de hacer sus propios mapas más efectivos y útiles.
Hasta aquí llega el artículo “Un poco de PNL”, ahora que has adquirido unos cuantos conocimientos, te pido que reflexiones sobre cómo es tu mapa del mundo, cuáles son tus filtros (creencias, juicios, valores), piensa en una persona con la que choques habitualmente e intenta ponerte en su lugar y por último imagina una situación en la que hayas tenido un conflicto y posiciónate en las tres posturas. Para terminar te animo a que tu mapa vaya creciendo y enriqueciéndose con el de otros, cuántas más posibilidades y recursos generes más eficaz serás en aquello que quieras conseguir.
